La boda de Victoria López-Quesada y Enrique Moreno de la Coba se ha convertido en uno de los eventos más significativos de la alta sociedad española, no solo por el enlace en sí, sino también por la reunión inesperada de algunos de los miembros más destacados de la familia real. Esta ceremonia no solo unió a la pareja en matrimonio, sino que también trajo consigo la reconciliación de la familia del rey Felipe VI, con la asistencia de las infantas Elena y Cristina, sus hermanas. El evento tuvo lugar en la finca Soto Mozanaque, en el municipio madrileño de Algete, en una celebración que estuvo marcada por la presencia de figuras importantes de la realeza y la aristocracia, así como por momentos emotivos y sorprendentes.