Se ha revelado la identidad del misterioso hombre que sale con Shakira, la exnovia de Gerard Piqué.

Shakira llamó especialmente la atención cuando fue vista en una cita romántica en Miami.

En concreto, la cantante colombiana fue grabada mientras cenaba con un misterioso hombre en el restaurante Lido Bayside, ubicado en The Standard Spa de Miami

. “¿Shakira ha reconstruido su vida amorosa?”, esa es la pregunta que se hacen muchas personas, especialmente los entusiastas fans de Shakira en estos momentos.

Después de que el video se volvió viral, muchos fanáticos siguieron planteando la hipótesis de quién podría ser el misterioso hombre con el que cenó Shakira.

Mientras algunos dicen que Shakira pudo haberle dado una nueva oportunidad al amor, otros dicen que tal vez fue una reunión de trabajo o simplemente la ex WAG salió a tomar unas copas con una amiga.

Según una edición reciente de Marca, el compañero de cena de Shakira resultó ser Antonio de la Rúa, su exnovio. El encuentro no fue una cita romántica, sino puramente de negocios.

“Antonio de la Rúa será el contador de Shakira. Su relación es de extrema confianza. Durante los últimos dos meses, las dos han estado trabajando juntas en un proyecto a largo plazo”, compartió una fuente cercana a Shakira a los medios.

Es importante saber que los dos estuvieron juntos durante 11 años y De la Rúa incluso fue representante de Shakira, pero ella dejó a De la Rúa para iniciar una relación con Gerard Piqué.

Shakira incluso acusó a De la Rúa de “robar” más de 5 millones de euros. Sin embargo, la relación entre ambos finalmente se normalizó.

Fernando de la Rúa, quien se desempeñó como presidente de Argentina desde 1999 hasta 2001, es una figura que ha sido recordada por su administración en tiempos económicos difíciles.

Sin embargo, su relación con la cantante Shakira, una de las artistas más influyentes de América Latina, también ha sido un aspecto interesante y significativo en el contexto de la política y la cultura argentina de esa época.

La conexión entre De la Rúa y Shakira se remonta a un evento particularmente destacado: el lanzamiento del álbum “MTV Unplugged” de la cantante en 1999.

Durante ese período, Shakira estaba en el apogeo de su carrera y su influencia en el mundo de la música estaba en ascenso.

El presidente de Argentina, Fernando de la Rúa, se mostró como un firme admirador de la artista colombiana y aprovechó la ocasión para fortalecer los lazos culturales entre su país y el resto de América Latina.

Una de las principales razones por las que esta relación se destacó es porque De la Rúa, a pesar de su enfoque en la política y la economía, entendía la importancia de la cultura y el entretenimiento como herramientas para promover una imagen positiva de Argentina en el escenario internacional.

Shakira, con su fama creciente y su éxito global, era una figura ideal para representar a la región en eventos importantes y como embajadora cultural.

En 2000, cuando Shakira realizó una visita a Buenos Aires, la relación entre la cantante y De la Rúa se hizo aún más evidente.

Durante su estadía en la ciudad, Shakira fue recibida con honores y se reunió con De la Rúa en un encuentro que atrajo una significativa cobertura mediática.

Este evento no solo destacó la admiración que De la Rúa sentía por Shakira, sino también la voluntad de su administración de fomentar una imagen positiva y moderna de Argentina a través de figuras culturales prominentes.

La interacción entre De la Rúa y Shakira no solo fue un asunto de protocolo y admiración mutua, sino también una estrategia para fortalecer el vínculo entre la cultura y la política.

De la Rúa, al involucrarse con una figura de la magnitud de Shakira, intentaba aprovechar su popularidad y su influencia para mejorar la percepción de Argentina en el contexto internacional.

En un momento en que su administración enfrentaba desafíos económicos y sociales, la asociación con una estrella global como Shakira ofrecía una forma de resaltar aspectos positivos del país y promover una imagen de modernidad y dinamismo.

A pesar de los desafíos políticos y económicos que enfrentó durante su presidencia, el vínculo con Shakira se mantuvo como un recordatorio de cómo la cultura puede jugar un papel importante en la diplomacia y en la forma en que los líderes buscan conectar con sus ciudadanos y con el mundo exterior.

Esta relación subraya cómo la música y la cultura tienen el poder de transcender fronteras y de influir en la percepción pública, incluso en el ámbito de la política.

En conclusión, la relación entre Fernando de la Rúa y Shakira es un ejemplo de cómo la política y la cultura pueden intersectar de manera significativa.

A través de su admiración por la cantante y su esfuerzo por integrar la cultura en su administración, De la Rúa intentó construir una imagen positiva de Argentina en una época de desafíos.

Esta conexión subraya la importancia de la cultura en la política y cómo las figuras públicas pueden utilizar su influencia para fortalecer los lazos culturales y promover una identidad nacional en el escenario global.