La historia de amor entre Jennifer López y Ben Affleck, una de las más mediáticas y comentadas en la última década, ha llegado a un final inesperado y turbulento. Aunque muchos creían que esta segunda oportunidad para “Benifer” sería el cuento de hadas que finalmente encontraría su desenlace feliz, la realidad es mucho más sombría y complicada de lo que se había anticipado.

La relación entre Jennifer López y Ben Affleck no es nueva; comenzó en 2001 durante el rodaje de la infame película Gigli. A pesar de las críticas destructivas que recibió la película, el romance entre ambos actores floreció. En junio de 2002, poco después de conocerse, Jennifer López solicitó el divorcio de su segundo esposo, Cris Judd, y su relación con Affleck rápidamente se hizo pública, lo que levantó una ola de atención mediática.

En noviembre de 2002, Affleck le propuso matrimonio a López con un anillo de diamantes rosa de seis quilates. La noticia encendió el interés de los medios y convirtió a la pareja en el centro de la atención pública. Sin embargo, la presión y el constante escrutinio por parte de la prensa se hicieron sentir. En 2003, a menos de un año de su compromiso, la pareja anunció su separación, citando la invasión de la prensa como una de las razones principales.

Tras casi dos décadas y varias relaciones fallidas, Jennifer López y Ben Affleck volvieron a estar juntos en mayo de 2021. Ambos habían pasado por divorcios recientes, ella de Marc Anthony y él de Jennifer Garner. La noticia de su reencuentro sorprendió a muchos, y pronto empezaron a aparecer en público juntos, abrazados y tomados de la mano.

A pesar de la aparente felicidad de su reencuentro, las señales de tensión no tardaron en aparecer. La pareja se casó en una rápida ceremonia en Las Vegas en julio de 2022, seguida de una segunda ceremonia en la mansión de Affleck en Georgia. A pesar de la apariencia de felicidad, se empezaron a notar signos de problemas en la relación.

Uno de los problemas más mencionados es el carácter controlador de Jennifer López. Se rumorea que su contrato prenupcial contenía estrictas cláusulas, incluyendo una prohibición absoluta de la infidelidad. Este tipo de control en una relación puede ser perjudicial y generar una presión adicional, especialmente en una relación ya de por sí expuesta a la luz pública.

Ben Affleck, por su parte, ha tenido problemas públicos con el alcoholismo, lo que también ha puesto en tensión su relación con López. A pesar de sus intentos de superar estos problemas, los viejos hábitos son difíciles de dejar atrás, y los rumores sobre su contacto con su exesposa Jennifer Garner solo añadieron más presión a la relación. Por otro lado, las especulaciones sobre una posible cercanía entre López y su ex, Alex Rodríguez, también contribuyeron al drama.

Uno de los episodios más oscuros en la vida de Jennifer López que resurgió durante el proceso de divorcio fueron las cintas de Diddy. En el 99, López estuvo involucrada en un tiroteo en una discoteca de Manhattan, y aunque las acusaciones fueron retiradas, el episodio dejó una mancha en su historial. Las cintas encontradas en una redada en una de las mansiones de Diddy contenían material comprometedor que involucraba a López, lo que volvió a atormentar a la pareja.

Para mediados de 2024, se hizo evidente que la relación de Ben y Jennifer se estaba desmoronando. Se observó que ya no se les veía juntos en público y Ben Affleck fue visto sin su anillo de bodas. Jennifer López intentaba mantener las apariencias, pero su círculo cercano sabía que estaba devastada. La venta de la casa que compartían en Los Ángeles fue la señal definitiva de que la relación había llegado a su fin.

El 20 de agosto de 2024, en el segundo aniversario de su boda, Jennifer López presentó oficialmente la solicitud de divorcio. La fecha oficial de separación se había registrado como el 26 de abril de 2024, confirmando que ya llevaban meses viviendo separados.

La influencia de terceros, como la familia y amigos cercanos, también jugó un papel crucial en el final de la relación. Ben Affleck encontró apoyo en su exesposa Jennifer Garner y en su amigo Matt Damon, quienes le ofrecieron apoyo emocional y le aconsejaron tomar decisiones drásticas para evitar que su relación con López lo llevara por un mal camino.

Las cintas comprometedoras de Diddy se convirtieron en una especie de moneda de cambio en el proceso de divorcio. Algunos rumores sugieren que Affleck podría haber utilizado estas cintas para inclinar la balanza a su favor. Matt Damon, preocupado por el bienestar de su amigo, intentó intervenir para evitar que Affleck cayera en viejos hábitos autodestructivos.

La historia de amor entre Jennifer López y Ben Affleck, que comenzó con tanta promesa y pasión, ha terminado en un torbellino de drama, traición y secretos del pasado. La relación que prometía ser un segundo intento de encontrar la felicidad ha sido marcada por problemas antiguos y presiones externas, demostrando que incluso las historias de amor más mediáticas pueden tener finales amargos.