Kim Kardashian, la estrella de la televisión y magnate de la moda, ha sido protagonista de una historia increíble que involucra al multimillonario fugitivo Jho Low.

Documentos del FBI han revelado detalles sorprendentes sobre cómo Kardashian terminó con una bolsa llena de dinero robado después de una noche de fiesta con Low, un personaje infame conocido por su implicación en el escándalo financiero de 1MDB.

El 3 de marzo, Bloomberg Businessweek publicó información detallada sobre la participación de Kim Kardashian en una investigación del FBI en 2019 relacionada con Jho Low. Según los documentos obtenidos por Bloomberg, Kardashian, la fundadora de SKIMS, se reunió con Low y dos productores del filme El Lobo de Wall Street, Riza Aziz y Joey McFarland, en un casino de Las Vegas en 2009.

La reunión, que tuvo lugar en una sala privada del casino, se extendió hasta la mañana siguiente. Durante la sesión de baccarat, Kim Kardashian inicialmente quería irse, pero decidió quedarse después de escuchar que Low solía repartir fichas a sus acompañantes al final de las sesiones de juego. Tras una gran victoria en una ronda de baccarat, Kardashian fue premiada por Low con fichas valoradas en 350.000 USD. Aunque Kim intentó devolver las fichas, Low insistió en que se las quedara.

Los documentos del FBI describen un incidente sorprendente: Kardashian recibió una bolsa de basura llena de billetes de 100 USD, totalizando 250.000 USD, como parte de su premio. La estrella de la televisión supuestamente guardó la bolsa en su bolso y abordó un vuelo de Southwest Airlines de regreso a Los Ángeles. En un evento posterior, Low también le entregó 100.000 USD adicionales en efectivo y otros 305.000 USD para costear los fuegos artificiales en su boda con Kris Humphries en 2011.

Kardashian utilizó parte del dinero para comprar un Ferrari blanco, que luego vendió para adquirir un Lamborghini que estaba a nombre de su segundo esposo. En 2014, Low ofreció a Kardashian una obra de arte del famoso artista estadounidense Jean-Michel Basquiat. Sin embargo, Kardashian, previa consulta con su tercer esposo Kanye West, pidió a Low que cambiara la obra por una de Claude Monet, una solicitud que aparentemente buscaba complicar la situación debido a la naturaleza caprichosa de Low.

Jho Low, nacido en 1981, es un multimillonario malasio que actualmente se encuentra en la lista de los más buscados a nivel internacional por su implicación en el escándalo de corrupción y lavado de dinero del 1MDB. Se le acusa de ser el cerebro detrás del desvío de 4.5 mil millones de USD del fondo estatal de desarrollo económico de Malasia durante el período de 2009 a 2015, obteniendo una ganancia ilícita de aproximadamente 700 millones de USD. Low niega todas las acusaciones.

Antes de que sus crímenes salieran a la luz, Low era conocido por su estilo de vida extravagante y su afición por las fiestas con celebridades. Gastaba grandes sumas de dinero en bienes raíces y arte, e incluso financió parte de la película El Lobo de Wall Street protagonizada por Leonardo DiCaprio.

Documentos del FBI también revelan que DiCaprio tenía una relación cercana con Low, asistiendo a fiestas con él en Las Vegas. Según las autoridades, DiCaprio mantenía sus relaciones bajo el radar hasta que las noticias negativas sobre Low comenzaron a surgir en los medios de comunicación. En respuesta, DiCaprio y su equipo empezaron a distanciarse de Low, especialmente cuando el escándalo de 1MDB se desató en 2015, justo cuando DiCaprio estaba organizando una gala benéfica en Saint-Tropez.

Low prometió donar una obra de Roy Lichtenstein para una subasta benéfica, pero nunca cumplió. Esto llevó a DiCaprio a retirarla de la subasta y a distanciarse de Low, sintiéndose avergonzado ante sus socios.

Aunque tanto Kardashian como DiCaprio han estado involucrados con Low, las fuentes indican que ambos pudieron haber sido engañados por el multimillonario fugitivo. En declaraciones a Page Six, se sugiere que ni Kardashian ni DiCaprio estaban al tanto de las actividades ilegales de Low y simplemente fueron víctimas de su engaño.

La increíble historia de Kim Kardashian y Jho Low resalta no solo la extravagancia del mundo de las celebridades, sino también las complejidades y peligros que pueden surgir cuando se interactúa con personajes controvertidos y multimillonarios en el epicentro de grandes escándalos financieros.