La situación entre Maite Galdeano, Sofía Suescun y Kiko Jiménez ha escalado a un nivel alarmante, con tensiones familiares que han pasado del ámbito privado al público. La relación ya fracturada entre madre e hija se agravó cuando Maite, justo antes de que Sofía partiera hacia Honduras para participar en Supervivientes, le envió un mensaje amenazador. Según reveló el periodista Omar Suárez en el programa Vamos a ver, Maite le dijo a Sofía: “Prepárate porque a la vuelta ya no vas a estar con Kiko, ya me voy a encargar yo de que esta relación se rompa y nunca más este señor vuelva a nuestras vidas”.

Este mensaje llegó en un momento en que Sofía estaba a punto de entregar su teléfono, quedando incomunicada durante su participación en el reality show. La amenaza dejó a Sofía sin oportunidad de responder ni de hablar con su pareja, Kiko Jiménez, quien se quedó encargado de su hogar mientras ella estaba en el concurso.

A los pocos días de este mensaje a Sofía, Maite contactó directamente a Kiko, enviándole un mensaje en el que, de manera despectiva, le pidió que se alejara de su vida y de la de su hija. Según Kiko, Maite le dijo: “Lo mejor para todos es que te pires de nuestras vidas. Se acabó tu chollo de venir a la finca de los Galdeano. En la tele a partir de ahora nos haremos los hipócritas, pero entre tú y yo la relación ha terminado y no volverás a pisar esta casa”.

Estas amenazas y la creciente hostilidad de Maite han llevado a Sofía y Kiko a tomar medidas legales, incluyendo la solicitud de una orden de alejamiento contra Maite. Kiko también ha declarado públicamente que Sofía estaba “aterrorizada” por las amenazas de su madre, lo que ha añadido más tensión a una situación ya de por sí complicada.

Este conflicto familiar, que ha sido seguido de cerca por los medios, se ha convertido en uno de los principales culebrones del verano, revelando la profundidad de la ruptura entre madre e hija y dejando en evidencia las dinámicas tóxicas que han marcado su relación.