Kim Kardashian ha redefinido el estatus de celebridad, pasando de la fama de los reality shows a convertirse en una magnate multimillonaria.

Su imperio vale 1.700 millones de dólares, incluidos bienes raíces, automóviles de lujo, moda, jets privados, un negocio próspero, influencia en las redes sociales y filantropía.

En términos de bienes raíces, la residencia principal de Kim es una mansión de 60 millones de dólares en Hidden Hills, diseñada por el arquitecto belga Axel Vervoordt, con interiores minimalistas. También posee un apartamento de 3,5 millones de dólares en Calabasas para reuniones de negocios y un rancho de 14 millones de dólares en Wyoming, que le ofrece un refugio lejos del glamour de Hollywood.

La colección de automóviles de Kim incluye el Lamborghini Urus ($200,000), el Rolls-Royce Ghost ($311,000) y el Mercedes-Maybach S580 ($185,000), cada uno elegido por su lujo y estilo.

Su impacto en la moda es profundo, con un guardarropa que incluye artículos codiciados como bolsos Hermès Birkin (cada uno con un valor de más de 500.000 dólares), una colección de joyas de 10 millones de dólares y trajes de los mejores diseñadores como Balmain, Givenchy y Versace, por un total de alrededor de 2 millones de dólares.

Kim, que viaja con estilo, posee un jet privado Gulfstream G650 de 65 millones de dólares, equipado con lujosas comodidades para el trabajo y el ocio.

En el aspecto empresarial, Kim fundó Skims, valorada en 4.000 millones de dólares, y anteriormente era propietaria de KKW Beauty, que se vendió por 200 millones de dólares. Sus empresas promueven la inclusión y los productos de alta calidad, lo que refleja su influencia en la industria de la moda y la belleza.

Kim tiene una amplia presencia en las redes sociales con 363 millones de seguidores en Instagram y gana entre 300.000 y 1 millón de dólares por publicación patrocinada. Sus respaldos, como las asociaciones con los auriculares Beats y la bebida energética Alani Nu, han mejorado estratégicamente su marca.

Además de su estilo de vida llamativo, Kim también está comprometida con la caridad, donando 10 millones de dólares a causas como la reforma penitenciaria y la defensa de la justicia social. Utiliza su plataforma para crear conciencia y promover cambios positivos, demostrando un impacto multifacético más allá de su condición de celebridad.