El reciente conflicto entre Ben Affleck y Sean “Diddy” Combs ha sacudido a Hollywood, ya que Ben ha presentado una demanda de 20 millones de dólares contra Diddy, alegando difamación. Este escándalo ha puesto en el ojo del huracán a varias figuras destacadas, especialmente a Jennifer Lopez, cuya relación con Ben ha sido objeto de especulaciones durante meses. La situación ha sido descrita como una bomba mediática que amenaza con revelar secretos oscuros sobre el pasado de estos famosos, sacudiendo las bases de la industria del entretenimiento.