El mundo de la realeza está lleno de protocolos, tradiciones y, por supuesto, relaciones complejas entre las diferentes casas reales. Recientemente, durante los Juegos Olímpicos de París, Amalia de Holanda, la heredera al trono de los Países Bajos, ha dado una verdadera lección no solo a Letizia Ortiz y a su hija Leonor, sino también a la Casa Real española en general. A través de su participación activa y sus interacciones, Amalia ha mostrado cómo una futura monarca puede desempeñar un papel relevante en eventos de esta magnitud, generando tanto impacto como admiración.