El domingo por la noche, el Príncipe y la Princesa de Gales felicitaron al equipo británico por sus increíbles esfuerzos en los Juegos Olímpicos de este año a través de un video en sus redes sociales. Junto a William, que mostraba un nuevo look con barba, Kate Middleton optó por un clásico atemporal: un top breton, que no es solo una elección de moda, sino también un símbolo cargado de significado.

Kate Middleton, siempre elegante, eligió el top rayado “Tori” de Ralph Lauren, una prenda que ha usado en varias ocasiones, incluyendo en 2013 durante un evento deportivo, haciendo compras en Anglesey y en las Houghton Horse Trials en 2016. Pero eso no es todo: esta primavera, cuando valientemente reveló que estaba en tratamiento contra el cáncer, optó por otro suéter breton, firmado por la marca británica Erdem.

A lo largo de su reinado de estilo, Kate ha optado frecuentemente por esta prenda emblemática en ocasiones menos formales y en eventos reales que requieren una apariencia más relajada. Por ejemplo, su impecable look para el Trooping the Colour a principios de este año incluía un lazo rayado personalizado y una cinturilla en un vestido blanco que ya había usado anteriormente.

El origen histórico de las rayas bretonas es fascinante: el uniforme de la marina francesa, con sus 21 rayas, rendía homenaje a las 21 victorias de Napoleón y permitía a los marineros ser fácilmente reconocibles en el mar. Coco Chanel, seducida por su aspecto y masculinidad, las hizo de moda para las mujeres en looks de ocio. Desde entonces, este patrón ha sido adoptado por muchas iconos de moda, como Brigitte Bardot, Audrey Hepburn, Carrie Bradshaw, Kate Moss, así como varios miembros de la familia real, como Diana y Meghan.

Pero más allá de su aspecto histórico y de moda, el top breton se ha convertido en una especie de “manta de confort” para Catherine. Cada vez que lo lleva, parece encontrar una fuente de confianza y consuelo, especialmente durante los momentos difíciles. Esta prenda simboliza una forma de constancia y fiabilidad, no solo para Kate, sino también para el público.

El top breton representa una forma de continuidad: un recordatorio de la constancia británica que se puede esperar de la realeza, al igual que el top rayado mismo, gracias a su duradera popularidad histórica. Su versatilidad y carácter inofensivo lo hacen una opción que la hace más accesible y relatable. Ya sea para una salida a la playa, al supermercado o a la puerta de la escuela, esta prenda resulta ser una opción popular y adecuada.

Además de esto, Kate es una mamá en plena temporada de vacaciones escolares, equilibrando los desafíos de una enfermedad mientras entretiene a sus tres hijos. El top breton se convierte entonces en un símbolo de resiliencia y simplicidad en un mundo a menudo complejo, ofreciendo a Kate una forma de confort en su vida cotidiana.

En conclusión, el top breton de Kate Middleton no es solo una elección de moda reflexiva, sino también una prenda cargada de significados personales e históricos. Le permite navegar a través de los desafíos de su vida con un toque de confianza y estabilidad, al tiempo que se mantiene conectada a sus raíces británicas y a una historia rica en simbolismo.