Jennifer Lopez ha roto su silencio en Instagram en medio de su divorcio de Ben Affleck, compartiendo una serie de mensajes enigmáticos y selfies sensuales. Jennifer Lopez tuvo un verano bastante movido.

La cantante de “All I Have”, de 55 años, reflexionó sobre su verano en medio de su divorcio de Ben Affleck, mientras compartía algunos mensajes crípticos en Instagram.

La actriz de Hustlers publicó una colección de fotos el fin de semana, mostrando a ella y a sus hijos en varias poses mientras participaban en diversas actividades veraniegas. En la segunda diapositiva, agregó una cita que decía: “Todo está sucediendo en orden divino”.

También incluyó una foto de una mujer con una camiseta que decía: “Está floreciendo y sin preocupaciones, fuera de alcance y en paz”.

Lopez subtituló la publicación con: “Oh, fue un verano”.

La cantante nominada al Grammy solicitó el divorcio de su cuarto esposo, Ben Affleck, el 20 de agosto, después de dos años de matrimonio.

Fuentes afirman que la separación ha dejado a Lopez “molesta y decepcionada” con la estrella de Argo, especialmente después de que él iniciara su reconciliación 20 años después de que la pareja cancelara su compromiso y rompiera.

La expareja ya vivía por separado en el momento en que ella presentó la solicitud, ya que la cantante registró su fecha oficial de separación el 26 de abril.

Recientemente, Affleck compró una casa en Pacific Palisades por 20 millones de dólares, mientras que Lopez continúa buscando un hogar propio, ya que, según se informa, no se siente cómoda viviendo en la casa conyugal de 60 millones de dólares que compartía con Ben y que ha sido puesta a la venta.

“Ellos compraron la casa para toda la familia. Es demasiado grande para ella y está llena de demasiados recuerdos”, dijo una fuente.

El viernes, Lopez fue vista en público por primera vez desde que solicitó el divorcio.

Fue fotografiada en Los Ángeles usando un anillo dorado sencillo que combinó con un anillo de diamantes en su dedo meñique.

Se la vio saliendo de un vehículo negro en Beverly Hills, California, y entrando inmediatamente en un edificio.